La agencia calificadora Moody’s ha revisado a la baja su expectativa de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de México para 2024, reduciéndola a un 1.3%. Esta decisión refleja un panorama económico complicado para el país, influenciado por diversos factores internos y externos que han afectado su desempeño económico.
Moody’s ha señalado que la economía mexicana enfrenta varios desafíos que han contribuido a esta revisión a la baja. Entre estos factores se encuentran la incertidumbre política, la debilidad en la inversión privada y las tensiones comerciales globales. Además, la lenta recuperación de la economía mundial tras la pandemia de COVID-19 ha impactado negativamente en las exportaciones y en el crecimiento económico general de México.
La agencia también ha destacado que la inflación persistente y las altas tasas de interés han limitado el poder adquisitivo de los consumidores y han aumentado los costos de financiamiento para las empresas. Estos factores han frenado el consumo interno y la inversión, elementos clave para el crecimiento económico. La combinación de estos elementos ha llevado a Moody’s a ajustar sus previsiones y a advertir sobre un panorama económico turbio para el país.
Moody’s ha expresado preocupación por la situación fiscal de México
El gobierno mexicano, por su parte, ha intentado implementar diversas medidas para estimular la economía, incluyendo programas de inversión en infraestructura y políticas de apoyo a las pequeñas y medianas empresas. Sin embargo, estos esfuerzos no han sido suficientes para contrarrestar los efectos negativos de los factores mencionados. La falta de confianza en el entorno político y económico ha llevado a una disminución en la inversión extranjera directa, lo que ha afectado aún más el crecimiento económico.
Moody’s también ha expresado preocupación por la situación fiscal de México. Aunque el gobierno ha mantenido un manejo prudente de las finanzas públicas, la deuda pública sigue siendo elevada y las presiones fiscales podrían aumentar en el futuro. La agencia ha señalado que es crucial que el gobierno implemente reformas estructurales para mejorar la competitividad y atraer más inversiones.
Ante la pérdida de fortaleza de la #economía en la primera mitad del año y señales de debilidad en el inicio de la segunda mitad, Moody’s recortó su estimado del #PIB.https://t.co/oi5NydPghb
— EF_Economia (@EF_Economia) August 30, 2024
A pesar de este panorama desalentador, Moody’s ha reconocido algunos aspectos positivos en la economía mexicana. La estabilidad macroeconómica y la solidez del sistema financiero son factores que podrían ayudar a mitigar algunos de los riesgos a corto plazo. Además, la proximidad geográfica y la relación comercial con Estados Unidos siguen siendo ventajas importantes para México.